lunes, 29 de abril de 2013

Yo no soy marinero, soy capitán

Hoy estaba teniendo un día de mierda.
Estaba teniendo uno de esos días tan de mierda que te apetecería no haberte levantado de no ser porque tienes la sensación de que, de haberte quedado en la cama, todo el edificio se te habría derrumbado encima; incluso los pisos que están por debajo del tuyo.
Pero, mira tú por donde, mientras volvía a casa dos lunáticos armados con un acordeón y una guitarra asaltaron el vagón de metro en el que viajaba y comenzaron a tocar. Como siento una debilidad absurda por el acordeón pero apenas tenía nada suelto más pequeño que una moneda de dos euros me disponía a darles un poco de miserable metralla hasta que se arrancaron a tocar una versión demencialmente pasada de revoluciones de La Bamba y de golpe y porrazo hicieron que el día valiese la pena, así que les dí los dos euros que no me podía permitir darles y me bajé del tren con una sonrisa de idiota que aun me dura.

Ritchie Valens.. La Bamba


Supongo que toda nube tiene un borde plateado... hasta que te escoñas en una avioneta de mierda, pero esa es otra historia.

Bonus Track

Los Lobos.. La Bamba

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